viernes, 1 de marzo de 2019

Opini贸n sobre el ensayo de Rosario Ferr茅 "La Cocina De La Escritura"

El delicioso ensayo de Rosario Ferré titulado “La Cocina De La Escritura” trata de varios temas que involucra de lleno a la mujer. Como el echo de que las mujeres no debían escribir/hablar sobre el sexo. E inclusive no se supone que hablaran vulgarmente. También habla sobre su primer cuento y lo entrelaza con, que, la mujer si decidía escribir una novela, ensayo o poema debía ser sobre la política o/e historia. Habla sobre la inspiración, el como intento redactar con todo su ser el que sería su primer cuento. El echo de que en ocasiones hay que dejar que la mente de uno fluya sin ponerle límites. Porque es así que nacen las verdaderas historias. Otro punto que toca es que, al ella escribir, escribe como a ella le gustaría que fueran las cosas. Destruye, aniquila. Además, también habla sobre su miedo de morir, morir sin haber hecho diversas cosas en vida, como viajar. Al hablar de esto da mención sobre una opinión que posee de que las mujeres y niños que mueren sin haber “vivido” están en una especie de limbo. En medio del cielo e infierno.


Ferré dice “Decidí tener paciencia y no desesperar, pasarme toda la noche en vela si fuere necesario. La madurez lo es todo, me dije, y aquí era, no debía olvidarlo, mi primer cuento. Si me concentraba lo suficiente encontraría por fin el cabo de mi anécdota. Comenzaba ya a amanecer, y el sol había teñido de púrpura la ventana de mi estudio, cuando, rodeada de ceniceros que más bien parecían depósitos de un crematorio de guerra, así como de tazas de café frío que recordaban las almenas de una ciudad inútilmente sitiada, me quedé profundamente dormida sobre las teclas aún silenciosas de mi maquinilla.” Cuando leí estas cuatro oraciones pensé en como ella quiso seguir el consejo que le habían dicho “Escribir sobre historia o política”. Lo que ella en ese momento no se había dado cuenta es que no siempre te va a salir una historia de un tema que te asignaron y si te sale no siempre es genuino. Al no poner límites, la escritura, la historia va cogiendo forma. Forma que tu corazón va dictando. Como Jane Austin, la afamada escritora de la novela “Orgullo y Prejuicio”. Ella no solo escribió en su novela sobre el romance si no que su protagonista en dicho libro era una “rebelde”. Claro para esa época. Elizabeth (el cual es el nombre de la protagonista) no tenía pelos en la boca, como dicen hoy en día.  Ella expresaba su opinión sin importar que pensaran los otros. Y eso me da a entender que para Jane Austin ese libro (no se si en los otros que escribió) fue una vía libre donde expresar su queja sobre como tenían que vivir en ese entonces. Rosario también escribió que las palabras son su más grande adoración, en otras palabras. Y ¿Cómo no serlo? Las palabras nos brindan consuelo, un tipo de consuelo que en ocasiones no se puede comparar ni con el más cálido abrazo de la persona que más ames. Ella dice que teme a la muerte. Y eso es algo que todas las personas han temido en algún punto de sus vidas.

Mi opinión sobre este ensayo, “La Cocina De La Escritura” es que la escritora quería transmitir de algún modo el como se siente una mujer en el mundo de la escritura. No solo cuando estaba en todo su esplendor si no cuando apenas empezaba. Dando sus primeros pasos en este mundo tan complicado. Y mas siendo mujer. Las discriminaciones que tuvo que soportar por el echo de que sus libros hablen sobre “pornografía” como un señor se atrevió a decirle. Es importante que las mujeres que sienten miedo (por decirlo de algún modo) se enfrenten a ello. Así como Rosario tuvo el coraje de publicar sus libros que fueron escritos con ira hacia el trato de la mujer. ¿Y tu mujer que me lees? ¿Vas a tener el coraje de enfrentarte a ese miedo que te impide hacer lo que deseas? Desde ahora te digo que tal vez recibas críticas de hombre como de mujeres, pero yo se que usted logrará lo que se proponga.